Capítulo 36
“Asignación de Tareas”


"...... Esto es malo. La comida que le iba a dar a Carolina ha sido robada.”

"No. No se preocupe. Dejando eso a un lado, maestro, ¿no tiene alguna herida en alguna parte?"

"Ah. No me lastimé de alguna manera."

Si me veo forzado a hablar de ello, al principio cuando evité la llama me rasguñé, pero una herida hasta este punto debería sanar aunque la deje tranquila.

"No. Del brazo del maestro, puedo oler el olor de la sangre fluyendo. ¿Quizás hizo algo más que rozarle el brazo izquierdo? Si está bien, ¿puedo tratar la herida?"

"... me rindo. Carolina puede ver a través de cualquier cosa.”

Cuando enrollé la manga de mi camisa para mostrar la herida, Carolina rompió una tela en reemplazo de una venda y aplicó un tratamiento de primeros auxilios.

"No es gran cosa. Durante generaciones, los vampiros han sido sensibles al olor de la sangre."

Yo, que oí las palabras de Carolina, tuve una idea en mi cabeza.

"Oye. Si Carolina es sensible al olor de la sangre, ¿no es posible para ella rastrear el olor del lobo que fue robado por el cocatriz?”

"...... deberia ser el caso, ¿no? Recuerdo el olor completamente, así que no creo que sea imposible. Creo que puedo oler sangre fresca desde una distancia de hasta 200 metros.”

Mi mayor preocupación cuando tomé esta quest fue cómo encontraríamos al cocatriz.

Si puedo obtener una pista sobre la información de la ubicación del objetivo, creo que podremos estar más cerca de la subyugación del cocatriz, sin duda.

"Gracias. Despues de todo, fue la decisión correcta hacer que Caro fuera nuestra compañera.”

En ese momento, había logrado crear una estrategia para derrotar al cocatriz.

Sin embargo.
Para que esta estrategia funcione, se necesita otra persona a cualquier costo.

"A~a. Hubiera estado bien si sólo alguna diosa hubiera sido tan útil como Caro.”

Suspiré diciendo unas palabras para provocar a Afrodita.

"¿¡Haa!? ¡Espera un minuto, Souta! Esas palabras que acabas de decir son imperdonables!"

Afrodita tiene una expresión irritada ya que me burlé de ella.
Afrodita refutaba mientras balanceaba sus senos maduros como dos frutas.

"¡Dame trabajo que hacer!  ¡Te mostraré que hasta yo puedo ser útil, Souta!"

"De acuerdo. Aunque hay un trabajo que quiero que hagas...... Un trabajo tan peligroso no se le puede confiar a una chica."

"Fufun. ¿Podrías dejar de menospreciarme? Aunque perdí todos mis poderes al bajar a la superficie, soy una diosa, ¿sabes? Puedo hacer cualquier cosa si es por Souta.”

"De acuerdo, ¿realmente harás cualquier cosa? ¿Puedo tomar eso como una promesa?"

"........ ¿Huh?"

Bien.
Obtuve el consentimiento de Afrodita y pude conseguir una de las cartas necesarias.

Una vez localizado el cocatriz, se habrán hecho los preparativos para derrotarlo.

"Hey, Sheryl. Hay algo que quiero pedirte que hagas, ¿está bien que te lo pida?"

“Ah, sí. Si hay algo que pueda hacer.”

Mientras preparo un plan para derrotar al cocatriz, juro vengarme de ese odioso ave dragón.