Maestro de Nada

Capítulo 271 - Ciudad laberinto

 

Observé el bosque sombrío pasar a toda velocidad mientras corríamos por el cielo. Bueno, yo era el que corría. El resto se mantenía en el aire con la magia de viento de Daniela, que las arrastraba en el viaje.

 

“El “Flotador Volador” existe desde hace mucho tiempo. Es un hechizo bastante simple que te permite moverte en el aire. Sin embargo, suele ser muy lento. Es sobre todo algo que se utiliza para enseñar a los niños la magia del viento en las primeras etapas.”

“Pero puedes moverte rápidamente con la ayuda de Patas del Dios Lobo.”

“Sí, todo depende de cómo lo uses.”

 

Daniela asintió. Lemon y la Gerente habían estado muy ruidosas y emocionadas al principio, pero ahora parecían estar disfrutando tranquilamente de la inusual vista. También era algo bueno, porque no era probable que esto se repitiera…

 

Una vez cruzado el bosque, se vio el pueblo circular. Estaba rodeado por una muralla redonda. Debía haber un pueblo encantador en su interior. Bueno, quizás era más bien un pueblo de codicia que se había alimentado del laberinto. Sin embargo, ahora no había nada de eso.

Había un castillo en lugar de un pueblo, y estaba apretado contra las murallas. Una fortaleza, tal vez. Esta cosa era aparentemente la mazmorra invertida. Y como antes había sido un pueblo, había casas ocasionales que sobresalían en lugares extraños, lo que hacía que el conjunto tuviera un aspecto aún más inquietante.

 

“Así que esto es lo que llaman un desastre de laberinto.”

 

Murmuró la Gerente.

 

“Casi no puedo creer que fuera un pueblo… podrías decir que esta mazmorra siempre estuvo aquí.”

 

Añadió Lemon. En efecto, no era el tipo de cosa que la mayoría de la gente creería fácilmente.

 

“Todos, miren hacia abajo.”

 

Daniela era la única que no miraba al pueblo, así que seguimos su mirada. Parecía un vasto campo que se extendía sin cesar, pero la luz del sol proyectaba ahora sombras que mostraban algunas pequeñas colinas. Un minotauro caminaba por una de ellas. Y había algo más. Algo que era mitad humano y mitad serpiente. ¿Una Lamia? Se deslizaba velozmente por la hierba hacia el bosque.

 

“Monstruos…”

“Sí. Deben ser de la mazmorra. Estaba bastante segura de que nuestro pequeño Minotauro era de allí, y parece que no estaba solo. El pueblo se ha invertido completamente.”

 

Tragué saliva. Así que eso lo dejaba claro entonces. Pero, ¿qué significaba eso para nosotros? ¿Debíamos ayudar a los residentes a escapar? ¿Exterminar a los monstruos? ¿Tratar de destruir la mazmorra? No estaba seguro en absoluto. Lo que había que hacer… era conseguir información.

 

“Entremos.”

 

No había otra opción. Sin embargo, probablemente deberíamos lidiar con esos monstruos primero.

 

“Habrá otros aventureros que se dirijan hacia aquí también. Y esos monstruos no serán un problema para ellos. Además, les ayudará a entender la situación aquí. Son como sacos vivos de información.”

 

Eso fue… severo. Pero no iba a discutir con Daniela en esto. Y los Aventureros de la capital eran particularmente confiados. Esta no era el tipo de misión que haría que se enviaran clases de piedra.  Así que probablemente era una buena idea dejar a los monstruos.

 

□ □ □ □

 

Descendimos hasta la entrada de la ciudad, pero lo único que veíamos eran muros. Esto se debía a que detrás de la puerta había otro muro que la bloqueaba. Pero supongo que ninguno de nosotros había esperado realmente que la entrada de la mazmorra coincidiera perfectamente con la del pueblo. Sin embargo, ¿de dónde salían los monstruos?

 

“Asagi. La pared está rota por allí.”

 

La Gerente señaló una parte de la pared que se había derrumbado. No había podido verlo desde arriba porque había una torre de vigilancia que la cubría. La torre sobresalía del parapeto y debajo había una grieta que se extendía hacia el suelo. Parecía que el más mínimo impacto podía hacer que toda la torre se viniera abajo. Así que tuvimos cuidado al acercarnos.

Una vez que estuvimos más cerca, quedó claro que era de donde habían salido los monstruos.

 

“Este rastro de aquí… es la Lamia.”

 

Dijo Lemon mientras se agachaba y trazaba el suelo con su dedo. Aunque serpenteaba un poco de lado a lado, el rastro se dirigía claramente hacia el bosque. Tal vez fue el instinto el que llevó a los monstruos a un lugar donde pudieran esconderse.

 

“Entremos entonces.”

 

Todos desenfundamos nuestras armas y las mantuvimos listas. Y entonces pusimos un pie en la fisura. El techo se desprendía en varios lugares… No sólo eso, sino que había huecos por todas partes, que dejaban entrar una cantidad decente de luz solar. Estaba hecha de piedra. Pero no cualquier piedra. Eran ladrillos pulidos que se apilaban unos sobre otros. El hecho de que sugiriera una delicada artesanía humana lo hacía aún más extraño. Me recordaba un poco a las ruinas de los elfos antiguos.

 

Amplié el alcance de Detección de Presencia. Había algunos monstruos y también humanos cerca. El más cercano era un pequeño grupo de humanos. Pero debido a que había monstruos cerca de ellos, era probable que se pelearan muy pronto. Sería ideal si pudiéramos llegar a ellos a tiempo para ayudar, pero no teníamos ningún mapa de esta mazmorra, lo que lo haría difícil. Así que después de discutirlo con los demás, se decidió que intentaríamos minimizar las bajas atrayendo a los monstruos hacia nosotros.

 

“¡Yo puedo hacer el mapeo!”

“¿Lo harás por nosotros?”

“¡Por supuesto!”

 

Gracias a la habilidad oculta de Lemon, también seríamos capaces de mapear el lugar. Yo había murmurado que no tenía un mapa, y Lemon había levantado la mano. Era bueno tener a una joven capaz con nosotros… aunque fuera mayor. Así que cambiamos un poco las direcciones. La gerente exploraría a la cabeza, yo sería la guardia media, Daniela sería la líder y la retaguardia. Lemon también apoyaría desde la retaguardia. Y así le pasé a Lemon la bolsa hueca.

 

“Oye, espera un momento.”

“¿Eh?”

 

Quité la pequeña figura que estaba atada a la bolsa.

 

“Es muy bonito.”

“Sí. Es importante para mí.”

 

Era “Gumi”. Un regalo de Merica, de la aldea Senka. Lo llevaba desde hacía tiempo, pero estaba en buen estado. La cuerda también era duradera. Pero sería mejor guardarlo en la mazmorra. No quería perderlo…

 

“Hay material de escritura en la bolsa, así que puedes sacarlo.”

“De acuerdo. …Hmm… ¿esto? Ah, ¡ahí!”

“Sí, eso es.”

“Quiero quedármela.”

“No puedes tenerla.”

 

Lemon se había encantado con la bolsa muy rápidamente. Pero esto era algo que Russell me había dado. Y yo no iba a renunciar a ella.

 

Cuando ya estábamos totalmente preparados, Detección de Presencia me alertó de que se acercaba un monstruo. Daniela dio la orden, y yo me moví detrás de la Gerente.

 

“Yo soy la exploradora aquí. Así que voy a tomar principalmente un papel de apoyo durante la lucha.”

“Uh, pero, ¿no que yo soy el guardia intermedio…?”

“Hazlo lo mejor que puedas, guardia intermedio.”

“¡Oye!”

 

La gerente sonrió y luego desapareció entre las sombras. Antes de que pudiera intentar detenerla, el monstruo dobló la esquina y se mostró. Era una Lamia. El torso de un humano y la mitad inferior de una serpiente. Llevaba una lanza con una cabeza de piedra. Inmediatamente siseó amenazadoramente al vernos.

 

“Muy bien, Asagi. Rindo probablemente la tomará por la espalda. Así que eres libre de atacarla de frente.”

“Ugh…”

 

Supongo que sí. No sólo esta cosa estaba en nuestro camino, sino que parecía muy feliz de luchar contra nosotros. El hecho de que fuera tan humana por encima de la cintura me hizo sentir un poco incómodo, pero era un monstruo. Definitivamente nos mataría. Así que suspiré y luego gruñí con determinación. Y con la espada del emperador negro en la mano, cargué hacia adelante.


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