Maestro de Nada

Capítulo 324. Pasta del pueblo pantanoso

 

Arkaroid no era tan grande, pero de alguna manera nos costaba decidirnos por un lugar para comer. Cada vez que mirábamos por las ventanas de cualquier restaurante, veíamos que la gente estaba comiendo sobre todo fideos. Tal vez por eso era conocido este lugar.

“Estamos bastante cerca de Usk, después de todo. Y hay muchos comerciantes que van a la capital. Como no les faltan ingredientes, no es de extrañar que puedan hacer cosas así. Además, aquí hay mucha agua. ¿Te has fijado en los pozos?”

Daniela siguió hablando. Cierto… Sí, tenía sentido. Yo no sabía mucho de fideos, pero había una gran variedad de ellos en la ciudad comercial.

“El pescado de aquí también debe ser estupendo. Pero quizás no tanto durante esta temporada.”

“Hmm… Pescado. Habría sido bastante agradable”.

“La belleza de comer es cómo se disfruta lo que está en temporada.”

“¿La belleza de comer?”

Normalmente, lo que estaba delante de ella era lo que comía sin mucha consideración. Sin embargo, me miró fijamente antes de que pudiera responder. Tragué saliva. En cualquier caso, hoy no habría pescado.

Aun así, había muchos lugares para elegir. Por supuesto, la mayoría parecían servir fideos. Pero sin duda había una gran variedad de estilos.

Así que, quizás lo primero que había que considerar era si los queríamos en sopa o no.

“Hay un lugar que me intriga. Deberíamos ir allí.”

“Realmente no me importa. Puedes elegir.”

“De acuerdo. Es por aquí.”

Daniela asintió felizmente mientras tomaba la delantera.

Ella se deslizó con gracia a través de las multitudes, y tuve problemas para mantener el ritmo. Casi parecía una especie de entrenamiento. Cada vez que ella se movía, aparecía alguien de la nada y yo tenía que esquivarlo frenéticamente. Y cada vez que eso ocurría, nos separábamos y tenía que alcanzarla. Hmm. Desafiante.

“Daniela. ¿Podrías ir más despacio?”

“¿Mm? …Ah, lo siento. Mi hambre me hace querer apresurarme.”

“Vamos juntos.”

“Sí.”

Me acerqué a su lado y la cogí de la mano. Ella era más fuerte y resistente que yo. Daniela era una verdadera aventurera veterana. Pero su mano era fina y suave. Supongo que realmente era una dama.

El lugar al que Daniela quería ir era uno de los primeros lugares por los que habíamos pasado. Y también ofrecía fideos. Bueno, era pasta.

“¡Bienvenidos!”

Nos quitamos la nieve de los zapatos y nos quitamos las capas antes de abrir la puerta y entrar. Un hombre mayor con barba blanca nos saludó alegremente.

“Disculpe, ¿tiene asientos para dos?”

“¡Siéntense donde quieran!”

Asentimos y miramos a nuestro alrededor. Estaba prácticamente lleno. Pero, por otro lado, muchos de los platos de las mesas estaban vacíos, y muchos de los clientes estaban disfrutando de sus conversaciones después de comer.

Encontré una mesa en el fondo que estaba desocupada y tenía dos asientos.

“Daniela.”

“¿Hm? Ah, ya veo. Menos mal.”

Le di un codazo, ya que ella también había estado mirando a su alrededor. Estaba visiblemente aliviada, ya que esto había sido idea suya. Todo por algo de comida… No pude evitar reírme.

Pasamos entre las otras mesas y llegamos a nuestros asientos. Tal vez porque llevábamos tanto tiempo caminando, me sentí de repente muy cansado cuando me senté en mi silla. También me sentía hambriento.

Había un menú encima de la mesa con un montón de nombres para los platos. Supongo que esto era lo que estaba en temporada. De hecho, había algunos platos de pescado, pero yo ya estaba en modo pasta.

“Así que…”

Los dos miramos el menú juntos. Hmm. Había muchas cosas, pero la mayoría de los ingredientes me eran desconocidos. Por supuesto, había algunos que sí reconocía, y esos parecían una apuesta segura.

“Muy bien, ya he decidido.”

“Hmm… ¿Qué elegiste, Asagi?”

“Este.”

Señalé la pasta de tomate. La seguridad es lo primero.

“No está mal…”

“¿Cuál estás considerando?”

“Debe ser la Pasta de Verduras de Invierno y Pimientos y la Pasta de Setas y Aceitunas Alexia.”

Bueno… esos sonaban bastante bien. Nunca había probado las setas Alexia.

“¿Crecen en las montañas entonces?”

“Sí. Son duras como piedras. Hay que aplastarlas con martillos y hervirlas hasta que se ablandan. Son deliciosas.”

“Interesante…”

Un hongo parecido a una roca que crece en las montañas rocosas. Probablemente serían difíciles de encontrar. Tal vez eran un manjar raro entonces.

“En efecto, son bastante raras. …Ya qué, lo elegiré. Ya que estamos aquí.”

“Bien. Ya está arreglado. ¡Camarero!”

Agité la mano y grité hasta que salió el camarero. Tal vez estaban en el descanso. Dos tazas fueron colocadas suavemente en la mesa”.

“¿Puedo tomar su pedido?”

“Yo pediré la Pasta de Tomate y Crema de Dana. Y ella tomará la Pasta de Setas y Aceitunas Alexia.”

“Por supuesto”.

Uf. Lo dije sin tartamudear. El camarero anotó todo y se retiró a la cocina. De repente me sentí bastante sediento, así que bebí el agua que había en la mesa.

“La leche Dana… el ganado de ese pueblo debe estar bien.”

“Sí, qué nostalgia.”

La leche Dana era de un lugar llamado Aldea Dana, que habíamos visitado una vez. Sus principales ingresos provenían de su ganado. Pero habían sido acosados por un guiverno menor que los atacó. Nosotros estábamos de paso. Y matamos al desafortunado guiverno entre ambos y también un Aventurero que vivía allí que se llamaba Yis.

“Espero que Mido y Marco estén bien.”

“Estoy seguro de que lo están. Ya que no hay ningún guiverno.”

“Y Marco es fuerte. Sí, deben estar bien.”

Mientras hablábamos de aquellos viejos tiempos, el camarero apareció en la esquina de mi visión. Llevaba platos en ambas manos mientras se abría paso entre las mesas.

“Aquí viene.”

“Mm…”

A Daniela se le iluminaron los ojos y se sentó recta.

“Aquí está. Su Pasta Alexia de setas y aceitunas.”

“Es mía.”

“Que la disfrute.”

La pasta que se colocó frente a Daniela tenía grandes setas marrones en su interior. Pero también había una variedad de otros tipos dentro también.

“Y aquí está la Pasta de Tomate y Crema de Dana.”

“Gracias.”

“Disfrute de su comida.”

Miré el plato. Era un rojo pálido. Más bien un color pastel que la salsa de carne o la napolitana. Era debido a la leche Dana que estaba mezclada en ella. Había verduras ralladas por encima que tenían muy buena pinta.

“Vamos a comer.”

“Sí.”

Cogí el tenedor y lo giré, con cuidado de que quedaran muchas verduras y salsa en el proceso. Luego me lo llevé a la boca. Había una suave acidez que iba bien con la textura firme de la pasta. Y las verduras añadían un crujido fresco y dulzura.

“Está delicioso…”

“También lo está el mío. Está claro que acerté al elegir este lugar.”

“Déjame probar un bocado.”

“Entonces debes darme dos bocados, Asagi.”

“Eso no es exactamente un intercambio justo. Un bocado.”

“Hmff… muy bien.”

Daniela empujó su plato al otro lado de la mesa y yo hice lo mismo.

Así que este enorme trozo era una seta Alexia, ¿eh? Sí, parecía algo duro. Probé a pincharla con el tenedor y me sorprendió. No estaba duro en absoluto. Era sólo esponjoso. Bueno, era un manjar, después de todo.

Las ricas setas combinaban muy bien con la suave y refrescante salsa de aceite de oliva. Envolví parte de la pasta con el tenedor y clavé un trozo de champiñón antes de llevármelo a la boca. Mis dientes rasgaron la textura esponjosa de las setas y mi boca se llenó de los dulces jugos. El sabor era bastante fuerte, pero era una buena combinación con la salsa de aceite de oliva. Y era realmente agradable de comer. Un plato interesante, por decir lo menos.

“Está muy bien…”

“La pasta tampoco está mal…”

“O-Oye. Eso es claramente un segundo bocado. Te he estado observando.”

“Tsk…”

No se podía bajar la guardia con ella. Estaba a punto de quedarme sin pasta.

Volvimos a intercambiar los platos y finalmente pude comer mi pasta recuperada con seguridad. Ambos nos concentramos tanto en nuestra comida que ya no hablamos.

Antes de darme cuenta, el plato estaba vacío. Daniela también había terminado y estaba bebiendo su agua.

“Ha sido genial… He subestimado a Arkaroid.”

“Supongo que estar cerca de Usk es una gran ventaja.”

Era una ciudad comercial después de todo… Tenían todo lo que se podía desear. Bueno, con suerte, eso significaba que podríamos conseguir un barco que nos llevara río abajo.

Hubiera sido agradable terminar la comida con una bebida y alguna charla ociosa, pero ya habíamos perdido bastante tiempo tratando de encontrar el lugar. Ah… Tenía tantas ganas de pedir un café y relajarme allí con Daniela.

“…Uf. Bueno, vamos entonces.”

“Pudimos comer, así que no me arrepiento.”

Sí, estaba reanimado. Y con eso, atravesamos la puerta oeste de Arkaroid y nos dirigimos a Usk. Nuestro siguiente destino no estaba tan lejos.


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