Sasaki y Pii-chan
Vol. 5 Heroína de la Justicia Parte 4
La magia de teletransportación de Pii-chan nos llevó directamente a la ciudad de Baytrium, y nos dirigimos directamente a la propiedad del Conde Müller. Desafortunadamente, el conde no estaba; escuchamos que había estado fuera por un tiempo. Cuando pregunté por más detalles, me dijeron que no había regresado desde que nos fuimos a visitar mis tierras juntos.
Pii-chan y yo nos apresuramos entonces al fuerte de las Llanuras Rectan. Había pasado un día entero en Japón desde nuestra última visita, y al observar el área circundante desde el cielo, vimos que se estaba formando un pequeño pueblo. Dejando de lado el asunto con los soldados del Príncipe Lewis, la región aún parecía estar en desarrollo.
Usando magia de vuelo, aterrizamos en un patio interior del fuerte. El conde salió a recibirnos de inmediato.
—¡Lord Sasaki! No podrían haber llegado en mejor momento, —dijo.
—Es bueno verlo de nuevo, mi lord.
—Me disculpo por la prisa, pero ¿podrían acompañarme?
—Sí, señor.
El fuerte y su área circundante estaban llenos de actividad, lo que significaba que había muchas personas observando. Para evitar miradas curiosas, nos dirigimos al interior del edificio. Nuestro destino era una sala de recepción familiar, la misma que habíamos utilizado durante nuestra última visita. Sin embargo, se había traído mucho mobiliario nuevo, y ahora se veía bastante lujosa. Parecía seguro asumir que la decoración interior del fuerte ya estaba terminada.
También vimos a alguien más en la sala.
—Barón Sasaki, Lord Sabio de las Estrellas, gracias por venir.
—Me alegra verlo de nuevo, Su Alteza Real.
—Lo mismo digo, Adonis.
Este era el segundo príncipe de Herz, líder de una de las dos principales facciones en la carrera por heredar la corona. El Príncipe Adonis se levantó del sofá al llegar nosotros, dándonos la bienvenida. Él era la única otra persona en la sala, por lo que Pii-chan se sintió cómodo hablando con normalidad.
—¿Puedo suponer, señor, que nuestra discusión se refiere al asunto con el Príncipe Lewis?
—Así es.
Ya lo esperaba, pero escucharlo en voz alta me puso tenso. Me limpié la somnolencia de la cara.
—Sé que es descortés de mi parte pedir esto cuando su hermano está en medio de una guerra, —dije—. Pero si le place, ¿podría actualizarnos sobre la situación actual? Nos gustaría mucho ayudar.
—Considera esto también como una petición mía, Adonis, —añadió el gorrión de Java de inmediato. Él es de lo más confiable.
Ante eso, la expresión del príncipe cambió. Parecía preocupado, y a la vez complacido. Un momento después, escuchamos la razón de ello de parte del propio hombre.
—Mi hermano ha logrado una gran victoria. Ha subyugado la base de vanguardia del Imperio mientras mantenía las bajas al mínimo.
—¿Qué…? —exclamé. Eso no era lo que esperaba que sucediera. El lord Sabio de las Estrellas tuvo una reacción similar; lo vi sobresaltarse en mi hombro.
—Recibimos una carta de él justo ayer, —explicó el príncipe.
— ¿Está seguro de quién la envió? —preguntó Pii-chan.
—Lo he comprobado y vuelto a comprobar, y definitivamente es la letra de mi hermano.
—Yo también lo verifiqué, Lord Sabio de las Estrellas, —añadió el conde, coincidiendo con el príncipe.
Era posible que el Imperio lo hubiera tomado a él y a otras figuras importantes como rehenes y lo hubieran obligado a escribir la carta, con el objetivo de atraer a Herz a que enviara personal de apoyo desarmado. Pero no llegaríamos a ninguna parte si seguía dudando de todo, así que decidí escuchar el resto de su explicación.
—Según la carta, él y sus fuerzas partieron desde aquí hacia la guarnición de Geschwür. Dice que el enemigo no había reabastecido completamente sus tropas después del incidente anterior y cayó ante un asalto frontal.
—¿Sabía el Príncipe Lewis eso antes de atacar? —pregunté.
—No lo sé, —respondió el príncipe—. Pero ciertamente es posible.
Pii-chan había destruido una parte significativa de la fuerza militar del Imperio con su magia. Si el Imperio estaba actualmente en caos, lo que describía el Príncipe Lewis bien podría ser cierto. Además, la relación entre el general que lideraba las tropas en el terreno y el margrave a cargo de la región parecía estar tensa.
Pero si ese era el caso, ¿cómo había descubierto el príncipe los asuntos internos del Imperio? ¿Tenía espías profundamente infiltrados en la nación enemiga, y nosotros no sabíamos de ellos? Tendrían que ser muy talentosos, si así fuera.
—Si lo que dices es cierto, esto provocará un cambio importante en la lucha por el trono.
Ante el comentario de Pii-chan, todos dirigieron la mirada al Príncipe Adonis. Si su hermano realmente había sido victorioso, ahora tenía una ventaja significativa. Para ponerse al día, Adonis necesitaría hacer algo igualmente glorioso como capturar una fortaleza imperial. ¿No sería eso realmente difícil? me pregunté. Los partidarios del segundo príncipe, yo incluido, ahora estábamos en una mala posición. Si esta noticia llegaba al palacio real, el estado de la competencia cambiaría de la noche a la mañana.
—Podría parecer descortés, especialmente para ustedes dos, que alguien en mi posición diga esto, —comenzó el príncipe—. Pero si esto condujera a un futuro mejor para este reino, entonces tal vez debería ceder la herencia a mi hermano.
Parecía que el príncipe había comenzado a perder su espíritu. Nos miró con una clara expresión de culpa en su rostro, demostrando claramente el tipo de hombre que era. No estaba buscando excusas para protegerse; realmente estaba reconociendo su propia falta de poder y priorizando el bienestar del reino.
En mi opinión, sin embargo, era un poco pronto para tomar esa decisión.
—De cualquier manera, señor, creo que primero deberíamos verificar la situación por nosotros mismos, —respondí.
—Sí, señor. Así es, —coincidió el conde.
—Dependiendo de la situación, las cosas podrían ser aún más graves que una simple derrota.
Los tres expresamos rápidamente nuestras opiniones, coincidiendo en que el informe sonaba demasiado bueno para ser verdad y que simplemente era demasiado pronto para sacar conclusiones.
—Por el momento, investigaré el asunto, junto con los movimientos imperiales.
—¿Está seguro, Lord Sabio de las Estrellas? —preguntó el conde.
— Sí, aunque necesitaré la ayuda de este hombre. —El gorrión giró su cabeza para mirarme.
¿Realmente necesitaba preguntar en ese punto?
—Si no te importa que alguien como yo te ayude, Pii-chan, entonces ayudaré con lo que necesites.
—Gracias. Y me disculpo nuevamente por involucrarte en nuestros asuntos.
—Bueno, todos tenemos que cuidarnos unos a otros, ¿verdad? Después de todo, ellos también nos están ayudando.
—Lord Sabio de las Estrellas, Baron Sasaki, gracias, —dijo el príncipe—. Estoy más que agradecido por su consideración.
Por mucho que pudiera decir, el ave seguía pareciendo tener al Reino de Herz en alta estima. Aunque sus comentarios a menudo sonaban conspicuamente distantes, se negaba a abandonar a sus ciudadanos cuando era necesario. Esto demostraba lo buena persona que era, lo que a su vez me hacía querer ayudarle.
— Me gustaría irnos lo antes posible, —dijo Pii-chan—. ¿Está bien contigo?
—Creo que es una buena idea, —dije—. ¿Vamos a la guarnición de Geschwür, entonces?
—Sí, ese era mi plan. Quiero verificar primero la seguridad de Lewis.
Si íbamos a encontrarnos con el Príncipe Lewis, tampoco tendríamos que escondernos con magia de transformación.
Y así nos pusimos en marcha para ver por nosotros mismos si el contenido de la carta era verdadero o falso.
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