¡Supervivencia en Otro Mundo con mi Ama!

Capítulo 217. Una Historia Implacable

Después de haber sido mimado por las arpías hasta quedar completamente satisfecho, decidí no pensar demasiado en el asunto de Amalie-san y Bertha-san. El mundo de la castidad, el matrimonio y las relaciones entre hombres y mujeres es muy distinto al del mundo del que provengo.

De hecho, ya hay muchas otras mujeres —además de Sylphy— que han mostrado interés en mí, incluidas incontables arpías, así que… ¿qué sentido tiene preocuparme por dos más? Hay más arpías de las que podría contar con los dedos de ambas manos. A estas alturas, ya es demasiado tarde.

—Kosuke, eres un Extranjero. En otras palabras, estás verdaderamente solo en este mundo. Creo que deberías dejar tanta descendencia como quieras, sin pensar demasiado en los detalles.

—Supongo que así es…

¡Pero es imposible! ¡No puedo simplemente «no pensar en ello»! ¡Ayúdame, Hombre León!

Busqué a Sir Leonard después de la cena para pedirle consejo, pero tampoco me dio la respuesta que esperaba. Más bien me ofreció… una especie de recomendación. No, espera, eso no era lo que pedí.

—Así son las cosas. Si todo sigue como hasta ahora… Kosuke, acabarás siendo el rey, el hombre que lidere el nuevo Reino de Merinard. Así que puedes tener todos los hijos que desees —dijo Sir Leonard, encogiéndose de hombros mientras sostenía una copa de hidromiel.

Sobre la pequeña mesa en la que estábamos sentados había más copas de hidromiel y tiras de carne seca cortadas finamente como aperitivo. Era un producto caro, más por su sabor que por su conservación.

—¿Y no habría algún problema con la sucesión al trono o algo por el estilo…?

Tenía la imagen de esos terribles conflictos por la sucesión en los que hermanos y hermanas se enfrentan por el poder. No quería ver a mis propios hijos peleando de esa manera.

—Kosuke, tú serás solo el consorte real, no un miembro de la sangre real de Merinard. El único hijo con derecho a heredar el trono será el que tengas con la Princesa Sylphiel. No importa cuánta de tu semilla esparzas, eso no afectará la línea sucesoria. Aunque…

—¿Aunque?

—Sería un desastre si tú y Su Alteza Sylphiel no llegaran a tener descendencia. Se dice que entre elfos y humanos es relativamente fácil concebir, pero los elfos, por naturaleza, tienen dificultades para engendrar hijos.

—¿Eso fue un intento de ánimo?

—Puede ser, pero Su Alteza Sylphiel no es la única que pertenece a la antigua línea real.

—Oye, espera un momento… ¿eso significa…?

¿Me quería decir que también debía tener hijos con las hermanas de Silphy?

—Exactamente lo que imaginas. Creo que tarde o temprano ocurrirá. Será mejor que te prepares para ello.

—No, no, no, eso no es lo que dijiste antes cuando mencionaste la sucesión al trono.

—Las otras princesas han declarado que no tienen intención de ocupar el trono del nuevo Reino de Merinard. Sin embargo, su sangre es la misma que la de la Princesa Sylphiel. En caso de que tú y ella no puedan tener un hijo, siempre existe la opción de adoptar al hijo de alguna de las otras princesas. Desde el punto de vista de la supervivencia del reino, mientras más opciones tengamos, mejor.

—No-no, espera, eso no es del todo cierto. Me niego a aceptar que los elfos tengan dificultades para concebir. Después de todo, Seraphita-san tuvo cuatro hijas, incluyendo a Sylphy.

—Eso es cierto. Quizá Seraphita-sama tenga una constitución especial, pero lo común entre los elfos es que les cueste concebir. Puede que la Princesa Sylphiel, al ser hija de Seraphita-sama, tenga más facilidad… pero por lo que he visto hasta ahora, no siempre es así.

—Ugh…

No pude replicar. Era un hecho que Sylphy y yo no habíamos tenido ningún hijo hasta ahora. No usábamos ningún tipo de anticonceptivo, así que si Sylphy fuera fértil, ya debería haber un bebé en camino desde hace mucho tiempo.

—…Dime que eso no es cierto, Barney.

—Soy Leonard. Y dime, Kosuke… ¿qué hiciste exactamente con Seraphita-sama?

—¿Eh? N-no, nada… ¿supongo?

El solo escuchar el nombre de Seraphita-san me hizo enderezar la espalda como si me hubiesen reprendido. No había hecho nada «serio», de veras. Solo… la consolé un poco, nada más.

—Incluso yo puedo notarlo a simple vista. Se le nota en los ojos. Tiene la mirada de una mujer completamente enamorada.

—Oh…

Ya lo había sospechado un poco, pero… no, seguro que era mi imaginación. Sir Leonard debía tener una vista demasiado aguda, eso era todo. No había nada de eso. Nada. En absoluto.

—Bueno, supongo que es mejor eso a verla caer en la desesperación. Entre las princesas, la santa y Seraphita-sama, parece que emites algún tipo de aroma que atrae a las mujeres de alta cuna, Kosuke. Incluso las princesas parecen estar de mejor humor últimamente.

—No estoy emitiendo ningún tipo de feromona sospechosa.

Aunque, ahora que lo pensaba… lo de los espíritus, Lima y las hadas que me rodeaban con tanto entusiasmo… eso sí era algo extraño. No podía ser por feromonas, ¿verdad?

Feromonas… Espera. Abrí mi menú y revisé los logros:

• Técnico: Satisface a tu pareja durante el acto sexual. Nada mal. ※ Aumenta el poder de ataque contra el sexo opuesto en un 10%.

• Donjuán: Sé favorecido por más de 20 personas del sexo opuesto. Bonito Bote. ※ Aumenta el poder de ataque contra el sexo opuesto en un 10%.

• Héroe: Mata personalmente a 3.000 humanos. Ya a este nivel, eso es más que ser un simple asesino, ¿no? ※ Aumenta todas las habilidades de los aliados en un radio de 100 metros en un 10% y facilita ser apreciado.

• Rompecorazones: Copula con más de 20 personas del sexo opuesto. Ya es hora de que alguien matara a ○○○○, ¿no? ※ Aumenta el poder de ataque contra el sexo opuesto en un 20%.

• Asesino de dragones: Derrota o somete a tres especies de dragones por cuenta propia. ※ Aumenta el poder de ataque contra dragones en un 15%.

• Creador de muerte: Mata a más de 10.000 personas usando un arma de tu propia creación. ¡Bienvenido…! ※ Aumenta en un 10% el rendimiento de las armas que fabricas.

• Donjuán Real: Sé favorecido por tres o más mujeres de alta nobleza. ¡Si vas a matarme, hazlo ya! ※ Aumenta el poder de ataque contra mujeres de estatus noble en un 30%.

• Donjuán de Maduritas: Sé favorecido por cinco mujeres 20 años mayores que tú. ¡Ay, eres todo un chico malo! ※ Aumenta el poder de ataque contra mujeres 20 años mayores en un 30%.

Había varios logros que ni siquiera recordaba haber obtenido, pero si todas esas bonificaciones de «poder de ataque contra el sexo opuesto» también influían en el ámbito amoroso… eso significaba que, contra Seraphita-san, mi «ataque total» estaba aumentado en un 105% … ¿verdad?

El efecto del logro de Héroe no está claro —no aparece como porcentaje— así que si es algo potente, podría ser un multiplicador, ¿no? Es decir, existe la posibilidad de que los demás logros también se multipliquen si no están expresados como porcentajes. Esta mecánica está bastante descontrolada, la verdad.

En cuanto a los comentarios, mejor ignorarlos. Si los obvio, los obvio.

Pero si los logros funcionan como lo imagino, hablar un poco por descuido o mostrar un gesto amable podría hacer que el sexo opuesto se enamore de mí… ¡Oye, Administrador, sal de tu escondite! ¡Esto es un fallo serio! Si hay más logros desbloqueados en la misma línea, la cosa se descontrola rápidamente.

—Oh no, creo que lo he descubierto.

—Qué hombre más sucio eres. Pero no quiero que te deprimas. —Sir Leonard se levantó y se apartó un poco de mí.

—¡No por un olor! ¡Ya lo dije, no es un olor! ¡Deje de llamarme sucio o algo así! ¡Me hará llorar!

—Jajajá, era broma. Va a ser duro, pero te las arreglarás. Tu vida de semental ya es inevitable, Kosuke.

—No necesitaba oír ese veredicto…

—Cuando llegas hasta aquí, lo único que queda es disfrutar. Si no te apetece vivir rodeado de mujeres hermosas como un semental, los hombres poco agraciados del mundo intentarán matarte.

—Jajaja… ¡Suerte, Sir Leonard!

Lo sé, lo sé. En el grupo principal que llegará pronto hay muchas viudas que suspiran por Sir Leonard. Hasta entonces, podrá fingir que el amor no va con él.

—Yo-yo me consagré a mi difunta esposa…

—Imposible que un noble con feudos no tenga heredero. Así que, suerte con eso.

—Lo-lo intentaré.

—¡Suerte! ¡Yo lo apoyo! ¡Si quiere, le paso un remedio bueno para ayudarlo!

¡No te saldrás con la tuya! ¡Ya verás…!

☆★☆

—¿Y qué pasó después?

—Hmm… bueno, algo así como autocompasión, hacer pucheros o revolcarme en sentimientos sin resolver; en resumen, eso me pasó.

Melty puso una sonrisa amarga.

Tras darle a Sir Leonard buena parte del energizante que funciona tan bien, volví a la habitación que me habían asignado. Allí estaba Sylphy, hundida en un montón de cojines, con la cabeza oculta y las piernas al descubierto. Además, dormía: inmóvil, como si hubiese caído rendida.

—No hay remedio, ¿no?

—No es para tanto. Es lo que hay; tendrás que esforzarte. Mucha suerte.

—Bueno… empecemos por sacar a esta princesa de ahí.

—Te ayudo.

Por ahora, hoy me dedicaré a ocuparme de la señorita, que ha tocado fondo y duerme sin preocuparse por nada. Queda mucho por hacer, y eso me da tiempo para eliminar las amenazas externas y asegurar una posición aquí.


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