Nivel 1

Capítulo 85 - Rescatando a todos



[Gracias... ¡gracias de verdad! ¿Cómo debo pagarte por esta amabilidad?] (Aaron)
[Muchas gracias por salvarnos.] (Rick)

El padre y el hijo, Aaron y Rick respectivamente, a los que salvé, me agradecieron una y otra vez.

[Es más, ¿qué les pasó a los otros aldeanos que fueron succionados en esta mazmorra?] (Ryouta)
[No estoy seguro.] (Rick)

Quería extraer alguna información sobre esta mazmorra de Rick, que casi había llegado a la entrada, pero todo lo que obtuve fue un encogimiento de hombros y un fruncimiento de cejas.

[¿No lo sabes?] (Ryouta)
[Al principio, todos estaban juntos cuando fuimos absorbidos por la mazmorra, pero la estructura siguió cambiando y terminamos separándonos. Incluso las casas desaparecieron.] (Rick)
[¿Qué quieres decir con que las casas desaparecieron?] (Ryouta)
[Aunque hubo varias casas que fueron arrastradas a la mazmorra, la tercera vez que la estructura de la mazmorra cambió, la casa de mi lado ya había desaparecido.] (Rick)
[¿La casa de Mei-chan?] (Aaron)

Rick asintió en respuesta a Aaron.

[Me preguntaba qué hacer, pero la última vez salí volando cuando pude ver una luz brillante delante de mí y también sentir las voces de los aldeanos, así que traté de escapar de la casa para salir de la mazmorra, pero había un monstruo y me las arreglé para escapar de él, aunque sufrí una gran herida, y usando lo último de mi energía, me arrastré hacia la entrada.] (Rick)
[Ya veo.] (Ryouta)

Por lo que puedo concluir, cuando la mazmorra fue vista por primera vez, unas 10 casas fueron tragadas.
Aunque todas ellas cayeron en el mismo lugar, por lo que escuché, hubo gente que fue a rescatarlas, lo que salió mal y terminó separando a los aldeanos en varios lugares.

Esto podría ser mucho peor de lo que había imaginado.


Después escolté a Aaron y Rick fuera de la mazmorra.
A lo largo del camino nos encontramos con tres de esos pequeños monstruos diabólicos, pero los derroté en un instante y continuamos a salvo.

Aunque era mi primera vez en esta mazmorra, además de que la disposición cambia cada vez que alguien entra, lo que hace que uno se pierda en el camino, me las arreglé para sacar a los dos de la mazmorra.

[¡Aaron-san! ¡Rick!] (Aldeano A)
[¿¡Están los dos bien!?] (Aldeano B)
[Me alegro de que estén todos bien.] (Aldeano C)

Los aldeanos se adelantaron e hicieron un círculo alrededor de nosotros mientras celebraban que estuvieran vivos.
Por otro lado, Alice y Eve se volvieron en mi dirección.

[Buen trabajo, Ryouta~.] (Alice)
[Parece que hay varias personas más atrapadas ahí dentro, así que voy a entrar una vez más.] (Ryouta)
[Oye, escucha esto, hace un momento otra persona escapó.] (Alice)
[¿Por sí mismo?] (Ryouta)
[En realidad no. Cuando Ryouta entró en la mazmorra y la disposición cambió, justo alguien apareció en la entrada de la mazmorra.] (Alice)
[Eso significa que cuando la estructura cambió, él fue llevado a la entrada. Lo que es más cercano que cuando Rick estaba cerca del calabozo.] (Ryouta)
[Tuvo suerte.] (Eve)

Eve habló con franqueza.
Es cierto que su suerte fue buena. Sólo puedo decir que tuvo la suerte de que el necesario salvador se acercara a la entrada tan pronto como yo entré en la mazmorra.

[Bueno, tiempo para entrar de nuevo, así que ¿cuántos quedan por salvar?] (Ryouta)
[Déjame ver, ya que Rick está aquí, otras 13 personas.] (Alice)
[Eso es mucho... Esperaba entrar una vez y salvarlos a todos, pero... Supongo que eso es imposible ahora.] (Ryouta)

Mirando la situación de los aldeanos que hemos podido rescatar hasta ahora, es mejor decir que se han dispersado bastante.

[Esta conejita también irá.] (Eve)
[Me parece bien. Entonces estaré contando contigo. Los monstruos no son tan fuertes, así que a Eve le resultaría bastante fácil.] (Ryouta)
[Oki.] (Eve)
[¿Qué hay de mí?] (Alice)
[Para Alice va a ser un poco más difícil, por lo que te sugiero esperar fuera.] (Ryouta)
[......De acuerdo. Eso haré.] (Alice)

Así, dejando atrás a Alice, Eve y yo entramos en la mazmorra al mismo tiempo.


Mientras pateaba a los monstruos, seguí dando vueltas por la mazmorra.
Se suponía que yo era la vanguardia, mientras que Eve era la retaguardia.
Aunque estaba un paso adelante de Eve cuando entré en la mazmorra, con sólo eso ella y yo fuimos separados.

Quienquiera que entre cambiará la disposición de la mazmorra. Es muy molesto.

De todas formas, me apresuré a pensar en una estrategia eficiente para rescatar a todos los aldeanos.

Como el diseño siempre cambia, pensé que no tenía otra opción que hacer un marcador, así que traté de golpear la pared del calabozo con mi mano derecha mientras procedía yendo hacia la derecha continuamente.
Ciertamente, con este método alcanzaré de alguna manera algo... que no me derribará.

[-san.]

De repente, escuché una voz humana a lo lejos.
En cuanto oímos esa voz, corrí hacia ella, doblando dos esquinas, y vi a una chica sentada en el suelo mientras lloraba.
Una niña de la edad de estar en primaria se agarraba a sus rodillas mientras lloraba.

[Tengo hambre.... y hace frío.......] (Joven)
[¡Oye, tú!] (Ryouta)
[—¡! ¿Quién eres, tío?] (Joven)
[Tí—] (Ryouta)

De repente me tomó desprevenido. Fue doloroso para mí, ya que mi corazón no vino preparado cuando escuché la palabra "tío".
Entonces rápidamente cambié mi mente alterada y corrí hacia la chica.

[¿Estás bien? ¿Te lastimaste algún lugar?] (Ryouta)
[Sí, estoy bien.] (Joven)
[Ya veo. ¿Cómo te llamas, pequeña?] (Ryouta)
[Meru.] (Meru)
[Oh Meru-chan. Bueno Meru, vamos a salir ahora mismo.] (Ryouta)
[Pero un demonio aterrador... está por aquí. Si nos movemos, nos encontrará.] (Meru)
[¿Te encuentra cuando te mueves?] (Ryouta)
[¡Sí! Parece que no puede verte si te quedas muy quieto.] (Meru)
[¿¡De verdad!?] (Ryouta)

No me di cuenta de esto en absoluto.
No, ni siquiera me molesté en notarlo.
Ya que, si te encuentras con un monstruo en una mazmorra, tus reflejos eran prepararte inmediatamente para la batalla, incluso si no quieres realizar un ataque preventivo.
Ni siquiera me habría dado cuenta de que el monstruo tendría características tan parecidas a las de un Daruma* con mi patrón de atacar siempre primero.
(Estuve mirando, y no entendí a que se refiere con que era como un daruma.)

[Así que debemos quedarnos quietos.] (Meru)
[De acuerdo. Gran trabajo notando eso. Ahora, vamos a salir.] (Ryouta)
[Pero el demonio…] (Meru)
[No te preocupes por eso, ahora vamos a darnos prisa.] (Ryouta)

Ayudando a la joven a ponerse de pie, seguimos adelante mientras la protegía.
De nuevo, usé mi mano derecha para marcar las paredes, y en el camino salieron monstruos para apuntar al objetivo más débil, que era Meru, pero todos ellos murieron al instante.

Finalmente llegamos a la salida después de caminar durante unos 20 minutos.

Cuando salimos, los mismos aldeanos que saludaron a Aaron y su hijo se reunieron alrededor de Meru.
Una joven mujer corrió hacia Meru y la abrazó. Al parecer, la joven que derramaba lágrimas mientras abrazaba a Meru era su madre. La joven madre que repetidamente pedía perdón lloraba, pero estaba feliz de que su hija estuviera a salvo.

Mientras miraba esa escena, llamé a Alice.

[¿Cuántos más?] (Ryouta)
[Quedan 12 más.] (Alice)
[Por lo tanto, ¿Eve no ha salido todavía? Ugh.... esto va a tomar demasiado tiempo.] (Ryouta)
[Duele cuando todos están separados.] (Alice)
[Cómo desearía que pudiéramos usar tácticas comunes. Como Clint dijo que la mazmorra siempre cambia, pensé que sería mejor traer algunos aventureros de élite, pero como se desarticula al sumergirse uno en la mazmorra, es mejor que entre menos gente.] (Ryouta)
[Entonces, ¿deberían entrar todos los aldeanos a la vez?] (Alice)
[Los monstruos en el interior son bastante fuertes.] (Ryouta)
[¿Qué tanto?] (Alice)

Del hombro de Alice, surgieron Huesitos y Saltitos.

[Alrededor de 5 veces más fuerte que Huesitos y Saltitos.] (Ryouta)
[Eso es realmente fuerte…] (Alice)
[Si entraras, podría ocurrirte un accidente mientras intentas rescatar a los aldeanos que ya están en apuros, así que te sugiero que no…. Oh, bueno, si los aldeanos son todos aventureros, entonces supongo que podría funcionar.] (Ryouta)

Una visión apareció en mi cabeza.
Justo cuando Rick y los siguientes aldeanos escaparon, había una posibilidad de que los aldeanos que estaban atrapados dentro llegaran cerca de la entrada si alguien entraba.

[Si hubiera un gran número de aventureros que pudiera protegerse, entonces podríamos dejarlos entrar uno por uno y aprovechar los rápidos cambios de la mazmorra.] (Ryouta)
[¡Entonces eso sería más rápido!] (Alice)
[Aunque contemplar algo imposible de hacer no tiene sentido. Supongo que volveré a entrar.] (Ryouta)
[Voy a esperar por ti, Ryouta. Pero creo que debo ir también. Si Ryouta va solo, eso tomaría demasiado tiempo.] (Alice)
[Pero...] (Ryouta)
[Está bien, ya que Huesitos y Saltitos están conmigo. Así que, ellos pueden protegerme también.] (Alice)
[…Si tú lo dices. Debo decirte algo antes de entrar; aparentemente los monstruos no podrán verte si te quedas quieta.] (Ryouta)
[Oh bien, ¿listos, Huesitos y Saltitos?] (Alice)

Los dos pequeños munchkins[1] en los hombros de Alice se sacudieron y saltaron.
Fue un movimiento encantador, pero hoy algo no encajaba.
Sin embargo, después de escuchar las palabras de Alice, sus cuerpos dejaron de moverse, y la razón por la que se detuvieron fue porque...

[—¿Eh?] (Ryouta)
[¿Qué pasa, Ryouta?] (Alice)
[……Alice, sobre Huesitos y Saltitos, después de que se transformaran y volvieran a ser pequeños, ¿qué les pasaría? Lo que quiero decir es, si fueran derrotados.] (Ryouta)
[¿Qué pasaría?] (Alice)
[Me refiero, ¿a dónde irían?] (Ryouta)
[Simplemente volverían a mí.] (Alice)

Mientras Alice dijo eso, hizo que Huesitos se volviera más grande.

A pesar de que se hizo más grande, su deforme encanto seguía ahí.
Luego se alejó diez pasos de nosotros, desapareció y volvió al hombro de Alice.

[¿No lo he hecho ya antes? ¿Al usar a Huesitos y Saltitos para pelear?] (Alice)
[Tienes razón.... Oye, Alice.] (Ryouta)
[¿Qué pasa?] (Alice)
[Si dejamos entrar a Huesitos y Saltitos... ¿eso cambiaría la mazmorra?] (Ryouta)
[Eeh…… ¡Aah!] (Alice)

Alice pareció entender lo que estaba diciendo después de una ligera pausa.

Entonces corrimos directamente a la entrada de la mazmorra.
Los aldeanos que estaban reunidos allí se preguntaban por qué empezamos a correr tan de repente.

[Alice.] (Ryouta)
[Bien. Entonces Huesitos, por favor haz lo tuyo~] (Alice)

Huesitos entonces se convirtió en un esqueleto de nuevo. Incluso cuando un monstruo apareció de la nada, aunque su apariencia parecía deformada, los aldeanos no tuvieron miedo.

Huesitos entonces entró en la mazmorra... y desapareció.

[¡Pasó lo mismo!] (Ryouta)
[¡Sí! Al igual que cuando Ryouta, Eve, y Rick entraron.] (Alice)
[Por lo tanto, ¿puede volver?] (Ryouta)
[Espera un momento… ¡vuelve a casa, Huesitos!] (Alice)

Huesitos luego volvió al hombro de Alice.

[Ve, ve, Saltitos.] (Alice)

Esta vez el limo entró en la mazmorra y desapareció, y la disposición de la mazmorra cambió una vez más.
Y luego regresó.

[Podemos hacerlo! ¡Sólo tienes que seguir haciendo eso entonces, Alice!] (Ryouta)
[¡Por supuesto! ¡Los dos, por favor!] (Alice)

Alice envió a sus compañeros monstruos uno tras otro al calabozo.

La estructura de la mazmorra cambiaba una vez cada 10 segundos.
Y cuando la décima vez.

[¡Es la casa de Kurau!] (Aldeano D)
[¡Un monstruo la atacó y está ardiendo!] (Aldeano E)
[¡Ayúdenme!] (Kurau)

En la entrada, pudimos ver que una casa estaba en llamas. No sólo eso, sino que los pequeños monstruos diabólicos estaban quemando la casa.
Al mirarla, los aldeanos corrieron de inmediato.

[¡No entren! Rayos, yo voy a la cabeza en primer lugar.] (Ryouta)

Saqué una bala de contención y apunté a los aldeanos que estaban corriendo.
Entonces una cuerda de luz brillante ata a los aldeanos.

[¿¡Qué es esto!?] (Aldeano F)
[¡No puedo salir!] (Aldeano G)

Dejé a los aldeanos de sangre caliente allí, y esta vez cargué balas perseguidoras.
Era difícil apuntar desde fuera de la mazmorra, ya que la entrada se vuelve más oscura a medida que se mira dentro de ella, por lo que no tuve más remedio que usar esto.

Después de doce disparos de balas perseguidoras, se dispararon en una trayectoria irregular y volaron hacia la mazmorra, golpeando a los pequeños demonios.

[¿Hay alguien ahí?] (Ryouta)

Llamé desde fuera de la mazmora, y allí una señora de mediana edad salió del edificio que estaba en llamas.
Su cara estaba llena de hollín y le hizo toser, pero parecía ser capaz de caminar por sí misma.

La mujer, llamada Kurau, se las arregló para salir de la mazmorra mientras se inclinaba.

[En unos 3 minutos salvamos a otra persona.... sigamos con este ritmo.] (Ryouta)
[¡Sí!] (Alice)

Alice envió a sus compañeros monstruos de nuevo para cambiar la disposición de la mazmorra.
A pesar de que la disposición cambia al azar e irregularmente, estaba funcionando.

Cada 10 o 20 intento un aldeano aparecía en la entrada, y yo me encargaba de derrotar a los monstruos, y los aldeanos que estaban mal heridos eras sanados con mis Balas Sanadoras, y para los que no podían caminar más, se tiraba una cuerda dentro de la mazmorra para sacarlos.

Los aldeanos que finalmente entendieron lo que estábamos haciendo se calmaron y nos dejaron en paz.

Después de lo que nos llevó una hora, finalmente rescatamos a la última persona.
Los aldeanos nos rodearon a Alice y a mí y levantaron la voz mientras nos aclamaban y alababan.

A propósito.

[Oooodio al nivel bajo.] (Eve)

No había ninguna explicación en absoluto, ya que Eve, que había sufrido más de 100 veces los cambios de diseño en el calabozo, se acercó a mí y de repente me golpeó la cabeza con más fuerza esta vez.


[1] Raza de gente pequeña que apareció en la película El Mago de Oz de 1939.