El Maestro del Valiente
Capítulo 150 - EpílogoEn el distrito noroeste de la ciudad imperial Simurgh.
Las calles estaban pavimentadas con adoquines, se habían
construido parterres a los lados de las carreteras y se habían plantado árboles
a lo largo de las calles.
Y en la esquina donde se alineaban las residencias de los nobles que se alojaban en la capital imperial, estaba la residencia del duque Mavis. Era una gran mansión comparada con las de los alrededores, acorde con el título de duque.
Los parterres estaban llenos de flores de temporada, los
árboles y las plantas habían sido recortados por jardineros de primera
categoría, y los pájaros piaban con un sonido fresco que tranquilizaba los
corazones de quienes visitaban la residencia del duque.
Así debía ser, pero en un rincón del magnífico jardín, el
ambiente tranquilo y sereno de las cuatro esquinas del jardín estaba llena de
una tremenda tensión que no era propia del lugar.
El origen de la tensión procedía de Wynn.
Estaba aún más tenso que ante Noale, el Dios de la
Destrucción.
Y no era de extrañar.
La persona sentada frente a Wynn. El hombre que se llevó una
taza de té a la boca con un gesto elegante se llamaba Lektor von Mavis. Era el jefe
de la Casa Ducal Mavis.
En otras palabras, el padre de Leticia.
“Siento haberte llamado con tan poca antelación, ya que
estás ocupado con tu nueva misión. Realmente quería conocerte en persona.”
“Sí, no, soy yo quien lamenta no haber intentado saludarlo
antes.”
“Eso no
se puede evitar. Después de todo, mi hija odia esta casa. Esa chiquilla… aunque
esté en la Capital Imperial, nunca viene a casa.”
“Oh,
no, eso es…”
Cuando Lektor
chasqueó la lengua en señal de molestia, Wynn no supo qué responder.
“Ha
crecido hasta convertirse en una chica increíblemente terca, a pesar de ser
llamada señorita noble. ¿No te está dando muchos problemas también?”
“No, en
absoluto. Letty… ella siempre ha sido una gran ayuda para mí. Y probablemente
es mi culpa que haya crecido con la actitud que tiene ahora.”
Después
de conocer a Wynn cuando era una niña, Leticia siempre había estado fuera de
casa. Lo que resultó en que ella había descuidado sus estudios de modales
nobles, etiqueta y cultura.
Era
difícil decir que Wynn, que había provocado que Leticia estuviera más dispuesta
a salirse de la casa, no tuviera nada que ver con su carácter actual.
Y Lektor
no negó tales palabras de Wynn.
“Así
es.”
Se rio al
decirlo.
“Pero
parece que, al conocerte, Leticia ha adquirido algo más importante que la
cultura y los modales. No me refiero sólo al poder y el prestigio de ser el
Valiente. Si no que se trata de lo que es importante para una mujer. Si Leticia
no te hubiera conocido y yo la hubiera criado como se esperaba, ella nunca
habría sido conocida como el Valiente.”
Entonces Lektor murmuró en voz baja.
Y como mujer, no podría haber crecido
para ser tan bella y delicada.
“Creo que la chica ha crecido mucho porque tú te convertiste
en su maestro y la guiaste”.
“Yo… yo no hice nada. Creo que Letty tenía originalmente un
gran talento latente, pero nadie supo cómo desarrollarlo, y entonces me conoció
y encontró la manera de explotarlo.”
“Puede que sea así. Pero, aun así, sigo creyendo que la
Leticia de hoy está aquí porque te conoció a ti. Muchas gracias.”
Dijo Lektor, y se inclinó hacia Wynn.
Él creía que era por haberlo conocido a él que Leticia era
quien era hoy.
“Por favor, levante la cabeza, su excelencia. Los ojos de
los sirvientes están puestos en usted.”
“Su majestad te dijo que eres un héroe a la altura de los
reyes y sacerdotes del mundo, ¿verdad? No hay nada extraño en que un duque se
incline. Además, las personas que quedan en la mansión son todas personas de
confianza que no tomaron partido ni por Stacia ni por Rails. No hay indeseables
que filtren lo que vean u oigan aquí al mundo exterior.”
“Padre.”
Entonces entró Leticia.
Llevaba un vestido azul claro que dejaba ver con descaro sus
hombros blancos.
“¿Qué haces con mi maestro…?”
“¡No, no! ¡No te apresures, Letty!”
Al ver la ansiedad de Wynn, Leticia debió de pensar que su
padre le había dicho algo sarcástico o algo así.
Wynn la detuvo a toda prisa cuando vio la intención hostil en
los ojos de Leticia al mirar a Lektor.
“¿Eh?”
Cuando Wynn se apresuró a sujetarla, Leticia le lanzó una
mirada de desconcierto.
“Sucede que tu padre me dijo algo que me sorprendió. No es lo
que tú piensas que está pasando.”
“Ya veo. Eso es bueno…”
A pesar de que Wynn intercedió, Leticia seguía mirando a Lektor
con cara de sospecha.
Este los observaba divertido interactuando entre ellos.
“Hmm. Nunca pensé en escuchar a Leticia calmándose tan
fácilmente… Lo que dicen los rumores debe ser cierto, que tenerte en control a
ti es lo mismo que tener el control del Valiente.”
Sin embargo, ahora Wynn también era llamado “el que ha
alcanzado el reino de los dioses”, y se le había concedido oficialmente el
título de Creador de la Espada por recomendación conjunta de Leticia, Raúl Orto
Lyon el Santo de la Espada, y el Emperador del Imperio Lemmrousell, Alexei Lau
Root Lemmrousell.
El propio Wynn se había convertido en una apuesta de alto
riesgo y peligroso para cualquier otro país que intentara obtener a Wynn por su
poder sobre el Valiente.
Ahora, gracias a Raúl, que promovía activamente las
actividades de Wynn no sólo dentro del imperio, este había empezado a ser
llamado un Héroe conocido incluso en otros países.
Pero el resultado.
Wynn se vio obligado a tomar una decisión.
El Valiente Leticia von Mavis y el Creador de la Espada Wynn
Bird.
El poder del Valiente y su maestro eran suficiente para que
otros países se sintieran amenazados.
Wynn tuvo que renunciar a su condición de caballero.
Pero, aunque tuvo que dejar de ser el caballero que siempre
había soñado ser, no se sintió demasiado mal por ello.
Fue porque se dio cuenta de que lo que realmente quería
proteger como caballero… era lo que siempre estuvo a su lado.
“Me hubiera gustado invitarte a cenar si es posible.”
“Si es una invitación de Su Excelencia el Duque,
definitivamente diría que sí…”
“Jajaja, no te preocupes por eso. Esa es una vestimenta
formal, ¿no? Si tienes una cita con el Emperador, es natural que le des
prioridad a eso.”
De hecho, Wynn y Leticia debían ir al Palacio Imperial
después de esto.
Tras dejar el Cuerpo de Escuderos, Wynn iba a estar a
disposición del Imperio como burócrata. Alexei quería hacer el nombramiento él
mismo, así que Wynn se puso su traje de ceremonia y se dirigió al palacio
imperial.
Cuando Lektor se enteró de esto, le pidió a Leticia que
trajera a Wynn aquí antes de ir al Palacio Imperial.
No siempre era fácil que Leticia obedeciera lo que Lektor le
decía, pero obedeció su orden y trajo a Wynn a la residencia del Duque Mavis
antes de la hora de la reunión.
Era posible que Leticia se hubiera dado cuenta del cambio de
opinión de Lektor.
En el pasado, su padre se había mostrado negativo hacia la
relación entre Wynn y Leticia.
La diferencia de estatus entre la hija de un duque y un
plebeyo era tan grande como el cielo y la tierra. Pensaba que él y Leticia
nunca serían felices.
Pero Wynn, que en ese entonces no era más que un candidato a
caballero, ascendió en el escalafón a una velocidad que sorprendió incluso a Lektor.
Comenzó a servir a la primera princesa del imperio, se convirtió en alguien muy
querido por el príncipe heredero y tuvo una audiencia con el emperador. También
mantenía una estrecha relación con las familias reales de otros países.
No muchas personas, incluso entre los grandes aristócratas, tenían
una red de contactos tan amplia.
Wynn, por cuenta propia, se había ganado el derecho a estar junto
a Leticia.
“Por cierto, Wynn-kun. He oído que tu espada de caballero
fue destrozada en la batalla con el Dios de la Destrucción, ¿qué harás ahora
que no la tienes?”
“Actualmente
estoy usando la daga que Letty me dio antes. Pronto me retiraré del cuerpo de
escuderos, así que pensé que ya no me sería tan fácil conseguir una espada de
caballero… Y ahora que lo pienso, esta daga demuestra que Letty tiene derecho
al trono. ¿Le importa si la uso yo?”
“No,
está bien.”
“Sí, es
mía, así que puedes usarla.”
“Oh, y
de hecho, tengo un regalo para ti, un regalo de agradecimiento.”
“¿Un regalo?”
“Sólo
un minuto. ¿Podrías disculparme un minuto?”
“No hay
problema. Todavía hay mucho tiempo para que me reúna con Su Alteza.”
Se
suponía que debía encontrarse con Cornelia en el Palacio Imperial.
Después
de recibir la carta de nombramiento de Alexei, los tres iban a tomar el té
juntos.
“Veo
que… la princesa también irá con ustedes hoy. Entonces eso significa que debo
entregártelo hoy mismo…”
Lektor murmuró
en voz baja, y se apresuró a volver a la residencia principal.
En su
mano trajo una espada.
“Padre…
¿¡esa espada no es…!?”
Leticia abrió los ojos de par en par cuando vio la espada en
la mano de Lektor. Entonces miró la cara de su padre, pero Lektor la ignoró y
le tendió la espada a Wynn.
“Esta es la espada. Me gustaría que la tuvieras.”
“Esto es… ¿Puedo intentar sacarla?”
Al ver que Lektor asentía, Wynn desenfundó la espada.
Estaba tan pulida como un espejo, y no había ni un solo signo
de daño en la hoja.
Incluso el ojo inexperto podía decir que era una obra de
arte.
Y los intrincados dibujos de la vaina, la empuñadura y el
filo le resultaban familiares a Wynn.
“¿Te has fijado ya? Es la otra mitad de la daga que te dio
Leticia. La espada larga y la daga son dos espadas que me dio el Emperador. Si
vas a usar la daga, también puedes quedarte con esta.”
“¿Estás seguro de esto, padre? ¿De verdad vas a darle esa
espada a mi maestro…?”
“Sí, él es el hombre que escogiste, ¿no? Estoy seguro de lo
que hago. Esta espada es un precioso tesoro para mi familia, la familia Mavis,
pero te la doy a ti. Cuida bien de ella.”
“¡Gracias, Padre!”
“Muchas gracias. La cuidaré bien.”
“Uh-hum.”
Wynn sostuvo felizmente la hoja a la luz del sol y la miró. Leticia
lo miraba feliz, con las mejillas teñidas de rojo.
“Por cierto, Wynn-kun, oí que hoy era la ceremonia de
nombramiento, ¿qué puesto tendrás?”
“Seré el
señor en funciones de una aldea recién creada de la que se va a hacer cargo Su
Alteza Cornelia.”
La
nueva aldea era el antiguo emplazamiento de la aldea donde vivían Liesbert y
los demás elfos.
En esa
aldea había un retoño del Árbol del Mundo, el árbol más importante para los
elfos. Sin embargo, la aldea fue destruida por los demonios, y el retoño se marchitó
bajo su poder.
Así que
Liesbert, que había ido a Elnasa, la capital del Árbol del Mundo, regresó con
Seri cuando consiguieron una semilla de retoño del Árbol del Mundo con el fin
de restaurar la aldea.
Originalmente,
eran los elfos los que cuidaban de los retoños, pero no tenían suficiente mano
de obra para construir una nueva aldea que cuidara de este.
Así que
los elfos negociaron con el Imperio Lemmrousell para que se encargara del
futuro retoño. El Imperio reclutó inmigrantes para construir una aldea allí.
Y como los
retoños del Árbol del Mundo tenían el poder de actuar como catalizadores de una
magia poderosa, se decidió que la nueva aldea estaría bajo el control directo
de la familia imperial.
Como resultado,
Cornelia se convirtió en la señora de la aldea y Wynn fue nombrado su adjunto.
La idea
de Alfred fue que, aunque ya no podía ostentar el rango militar de caballero,
como adjunto del señor podía excusarse en otros países como funcionario.
“Soy el
señor en funciones de una aldea pionera, y conozco a alguien que dirige una
granja, así que pensé en aprender algunas cosas para que cultiváramos los
campos.”
“Ya
veo. Si estás actuando como señor en funciones, ¿significa que serás tomado por
un noble?”
“No, no
he escuchado nada de eso por parte de Alfred-sama. Sin embargo, si eres el
señor en funciones de un territorio bajo el control directo de la familia
imperial, necesitas pasar por una ceremonia de nombramiento de Su Majestad el
Emperador, así que se ha decidido que visite el palacio imperial hoy.”
“Ya
veo. Pero el uniforme de ceremonia blanco que llevas ahora, ¿es una apropiación
del uniforme de ceremonia del cuerpo de escuderos?”
“Sí,
escuché que el color del uniforme de los escuderos iba a ser cambiado, así que
Su Alteza Alfred se rio y dijo que lo podía usar con una pequeña modificación.”
Wynn
miró su traje y asintió.
“El
nuevo uniforme de escudero será morado, ¿verdad?”
“Sí,
sí. Cuando le dije al capitán que iba a usar los uniformes del escuadrón, se rio,
diciendo que Su Alteza era una persona tacaña en formas extrañas. No duda en expresar
sus pensamientos aun cuando se trata de la familia real.”
“Sí…”
Wynn rio asombrado al decir esto.
Por
otro lado, Leticia tenía una expresión sutil en su rostro.
Wynn
no parece darse cuenta, pero parece que Leticia sí. En efecto, Leticia es una
mujer.
El
traje de ceremonia blanco era originalmente un color permitido sólo para la
familia real.
Durante
un tiempo, como excepción, se permitió que la comitiva imperial vistiera
uniformes blancos, pero cuando esa comitiva también cambió el color de sus
uniformes, la familia imperial y Wynn fueron los únicos del imperio permitidos vestir
de blanco.
En otras palabras, el Emperador Alexei y el Príncipe
Heredero Alfred habían hecho saber tanto en casa como en el extranjero que darían
la bienvenida a Wynn a la familia real como consorte de Cornelia.
“Oh, Onii-chan. Deberíamos ir al palacio imperial pronto…”
“Tienes razón. Estoy seguro que Cornelia-san estará esperando.
Me iré ahora.”
“Oh, por favor, siéntete libre de venir a visitarme de
nuevo. Si lo haces, mi hija, que nunca viene a casa, volverá a mostrar su cara.”
“¡Padre!”
“Sí, vendré de nuevo.”
Los dos se inclinaron ligeramente ante el guardia de la
puerta, el cual se inclinó reverentemente, y se marcharon, dejando a Lektor
para verlos partir.
Se sorprendió al ver que sus ojos ardían un poco cuando vio
que Wynn llevaba la espada enjoyada que le había obsequiado.
Entonces giró sobre sus talones y se dirigió hacia la
residencia principal, con los hombros temblando al no poder reprimir la risa
que le brotaba.
Al verlo, uno de los sirvientes miró a Lektor con una
expresión de asombro en su rostro, pero este no le prestó atención y se dirigió
a su habitación.
Normalmente, cuando uno visitaba el palacio imperial, dejaba
sus armas con los guardias.
Pero a Wynn y a Leticia se les permitiría llevar espadas.
Y en la ceremonia de investidura, el emperador y el príncipe
heredero se fijarían en la nueva espada de Wynn.
Esto se debía a que la espada pertenecía a un par que
otorgaban el derecho de sucesión al trono que el emperador le dio a Leticia
cuando nació, es decir, es una espada que debía entregarse a la persona que sería
la pareja de Leticia.
Y ahora que Rails y Stacia, que se pusieron del lado del
príncipe Neumann, habían perdido el derecho a heredar el trono y el ducado, y
estaban esperando su castigo, sabrían que Lektor había reconocido a Wynn como
heredero del Ducado Mavis como consorte de Leticia.
Se preguntó qué tipo de expresión aparecería en los rostros
de esos dos cuando se dieran cuenta de ello. Y cuando Wynn se diera cuenta también
del significado de la espada y del traje de ceremonia, ¿cómo reaccionaría y qué
elegiría? No podía evitar ansiar saberlo.
Siempre está la opción de quedarte con las
dos, tenlo en cuenta.
Una princesa imperial y la hija de un duque.
Las dos mujeres nobles de mayor rango del imperio, Wynn estaba
capacitado para amar a esas dos flores.
Eso es lo que creía ahora Lektor.
Y quizás el Emperador y el Príncipe Heredero pensaran lo
mismo.
Bueno, es él quien hará la elección.
Mientras haga la elección correcta, eso es lo único que importa.
Lektor regresó a su habitación con estos pensamientos,
confiando en que Wynn tomaría los medios para hacer felices a todos.
—Fin.
Nota del autor: ¡Este es el fin! ¡Muchas
gracias por leer hasta aquí!
Nota del traductor: Otra novela que se acaba. Como saben los lectores más antiguos, esta fue otra de mis primeras novelas que comencé a traducir. 5 años y poco desde que la comencé, y en algún punto pensé que nunca vería su final. No es la novela perfecta, tiene algunos cuantos agujeros de guion, y hasta era frustrante a ratos, pero yo, así como espero de ustedes, la disfruté de principio a fin. Sin más que agregar, me despido por ahora. --Frizcop.
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