Capítulo 353. Reencuentro con Arturo
“Hola. ¿Está Arturo aquí?”
“…Artuuuro… está… fuera… cazando…”
Realmente no había esperado una respuesta, pero pregunté de todos modos. Y esto fue bastante sorprendente. ¡Así que los monstruos eran capaces de aprender a hablar…!
“…Ya veo. ¿Les importa si esperamos aquí?”
“No… en absoluto…”
Como yo estaba demasiado sorprendido, Daniela había hablado por mí.
“Lo siento…”
“Yo también me sorprendí. Supongo que Arturo les ha estado enseñando.”
Efectivamente. Pero también fue un alivio ver el éxito que tuvieron. Arturo era un buen rey.
Justo entonces, Pochi, que estaba de pie detrás de nosotros, gruñó en voz baja. Me di la vuelta, preguntándome si se estaba enemistando con él. Pero parecía estar hablando con un orco. Como la mayoría de los orcos que había visto, éste gruñía de forma incomprensible. Sin embargo, era sorprendente que pudieran entenderse. Justo entonces, las tres caras de Pochi se volvieron hacia mí.
“Dice que Arturo se fue temprano por la mañana. Debería volver pronto, si cumple con su horario habitual.”
“Ya veo. Gracias.”
Pochi había percibido que no teníamos experiencia en hablar con monstruos, y por eso los interrogó por nosotros. Qué amable y perspicaz Cerbero.
Todos los orcos volvieron a su trabajo, y nosotros esperamos fuera del asentamiento durante unos quince minutos. Entonces pude percibir una serie de monstruos mediante Detección de Presencia. Uno de ellos era bastante grande. Probablemente se trataba de Arturo.
Cuando miré en esa dirección, vi a cuatro orcos que llevaban ciervos al hombro mientras caminaban hacia nosotros. Hablaban y reían, como cualquier cazador humano que se pueda ver.
Y uno de los orcos era blanco.
“Hmm. Tiene buen aspecto.”
“Sí. Es estupendo verlo.”
Uno de los orcos señaló hacia nosotros tras darse cuenta de que estábamos allí. Saludé y los cuatro me devolvieron el saludo. Aunque habrían visto que éramos humanos, parecía que aún estábamos demasiado lejos para que nos reconocieran… Pero entonces, Arturo empezó a correr.
“Casi tengo miedo…”
“No todos los días un gran orco viene corriendo hacia ti a toda velocidad.”
Mientras hablábamos y agitábamos las manos, Arturo nos alcanzó mientras jadeaba.
“Haa… haa… ¿Estoy… estoy soñando?”
“No, en absoluto.”
“Ha pasado un tiempo.”
“Sí… parece que fue hace mucho tiempo…”
Parecía muy contento de vernos. Comparado con la última vez, parecía saludable. Más grande. Pero también tenía más cicatrices… No quería pensar en lo difícil que había sido el camino hasta este lugar.
“Me alegro de que estén aquí. ¡Bienvenidos a mi pequeño reino, Camelot!”
Bueno, por qué no me sorprende… Esta conexión se estaba volviendo aún más extraña…
En cualquier caso, nos habíamos reunido con Arturo. Realmente habíamos viajado una gran distancia. Habíamos viajado por diferentes rutas, pero habíamos llegado al mismo lugar. Ahora, era el momento de relajarse y ponerse al día.
□ □ □ □
Y así, debido a nuestra inesperada llegada, decidieron hacer una fiesta. Sin embargo, había un problema.
“Hmm. No hay suficiente carne.”
Murmuró Arturo mientras miraba los ciervos que habían cazado. Sólo habían conseguido lo suficiente para los residentes.
Bueno, había una solución fácil para eso. Así que decidí conseguir mi propia carne.
“Muy bien, voy a salir a cazar entonces.”
“No, no podemos pedirle a un invitado…”
“Déjamelo a mí. Conseguiré uno bien gordote también.”
“¿De verdad…? Si insistes…”
Le di una palmadita en el hombro a Arturo y salí corriendo.
Bueno, aparte de no querer aumentar su carga, tenía otra razón para querer venir aquí. Era para hacer algunos ajustes de habilidades. Había probado un poco durante la noche, pero era muy diferente hacer uso de ella durante el combate. Así que era necesario hacer ajustes a través de Aprendiz de Todo, Maestro de Nada. Con algo de práctica, debería ser capaz de usarlo en combinación con Patas del Dios Lobo y Ojos del Dios Lobo.
Y así, con la bolsa hueca a la espalda, me puse la Hoja Blanca - Tenko en el cinturón. Era más ligera que la espada de armadura demoníaca y estaba acostumbrado a ella. Tal vez lo llevaba en la sangre. Y el ataque a distancia sería bastante útil. Daniela la había llamado dios de la destrucción natural. Probablemente se enfadaría si supiera que la utilizaría en un lugar como éste.
“¿Hmm? ¿Vas a alguna parte?”
Una vez que terminé de prepararme, activé Patas del Dios Lobo y me disponía a despegar. Pero entonces oí la voz de Daniela. Estaba masticando una fruta que alguien le había dado. Vi que unos cuantos niños orcos la seguían también. Orcos y elfos…
“Ah, estos niños. Parece que me han cogido cariño.”
“Bueno, deberían.”
“Entonces, ¿a dónde vas?”
“Sólo a cazar un poco. No tienen suficiente carne.”
Daniela pensó por un momento. Sabía lo que pasaba por su cabeza.
“Hmm. ¿Debo acompañarte?”
“Está bien. Deberías quedarte con los niños.”
No era tan cruel como para apartarla de ellos ahora.
“Ya veo. Bueno, estoy segura de que cazarás el doble sin mí.”
“Lo intentaré.”
Por supuesto, lo haré. Los saludé con la mano y luego floté en el aire. Los niños se quedaron asombrados y vitorearon. Cuando les saludé, me devolvieron el saludo con emoción. Muy bonito. Los niños podían ser tan puros.
“Hasta luego.”
“Ten cuidado.”
Y así me alejé de Daniela y salí disparado hacia el campo.
□ □ □ □
Después de unos minutos en el aire. Los vastos campos de hierba se extendían debajo de mí. Había arboledas dispersas, donde los animales podían descansar a la sombra y comer plantas.
“Bueno, hay muchos para elegir, al menos…”
Eso es lo que había. Bueno, al menos por ahora. No estaba seguro de lo grande que iba a ser este país. Mientras fueran sólo ellos, quizá no hubiera que preocuparse por la extinción.
En cualquier caso, hoy no iba a contenerme. Encontré uno que quería, y lo observé cuidadosamente mientras me acercaba.
Mi presa se parecía mucho a una gacela. Estaba ocupada comiendo hierba. Y tenía la intención de atraparla por detrás. Sin embargo, también necesitaba probar mi habilidad.
Así que junté las manos en señal de oración por la vida que iba a tomar, y luego desenvainé mi espada. Desde arriba y por detrás, activé Sombra del Lobo Profundo. Una sombra salió disparada en línea recta, y entonces de la punta surgió el clon. Éste blandió la Tenko, y la gacela corrió frenéticamente hacia delante.
Mientras la seguía, volví a activar la habilidad para que apareciera una sombra por delante. La gacela corrió entre la hierba y los árboles hasta que mi sombra saltó del suelo justo delante de ella.
Esto pareció sorprenderla enormemente, y pisó el freno mientras intentaba darse la vuelta. Pero sus pies resbalaron en la hierba. Cayó de lado y sus patas se agitaron salvajemente. Fue entonces cuando envié magia a la Tenko y la blandí en dirección a la gacela.
La hoja de platino salió disparada hacia ella, cortando limpiamente la cabeza. El cuerpo pareció saltar una vez antes de quedarse completamente quieto.
“Gracias.”
Junté las manos y aterricé en el suelo. Mis sombras habían desaparecido. Estaba solo.
Era extrañamente triste.
Le agarré las patas y levité con Patas del Dios Lobo para drenarle la sangre antes de quitarle rápidamente los órganos y luego guardarla en la bolsa hueca. Este proceso se repitió tres veces antes de regresar a Camelot.
Todavía había luz en el exterior, pero el sol empezaría a ponerse pronto. No quería llegar tarde al festín.
“Aun así… un festín en Cath Palug y un festín aquí… Supongo que esto es tener una gran vida social…”
Nunca había ido a la universidad, pero sentía que estaba probando la vida del campus. Pero era así todos los días para ellos, ¿no? Yo me volvería loco.
Bueno, era agradable, de cualquier manera. Estaban celebrando sólo por nosotros.
“Mejor me doy prisa…”
Guardé la espada y me ajusté la mochila antes de activar Patas del Dios Lobo y salir disparado hacia el cielo.
“Ohh…”
Quizás me había dejado llevar un poco, ya que perdí el equilibrio. Hacía tiempo que eso no ocurría. Así que me calmé y disminuí la fuerza del viento hasta que volví a estar estable.
“Me dejé llevar, eh…”
Fue como si el agua saliera de repente de un grifo obstruido. Tal vez la habilidad de Pochi me había confundido. Tendría que volver a hacer algunas simulaciones con Aprendiz de Todo, Maestro de Nada…
□ □ □ □
Volví a la aldea, y luego con Daniela y los niños, me dirigí a donde estaban cocinando la comida. Aquí, Arturo estaba descuartizando la carne, por lo que añadí la mía al montón.
“Ah, esto es bueno.”
“¿Verdad? Deja que te ayude.”
“Gracias. Eso hará las cosas más fáciles.”
No tenía sentido esperar sólo porque éramos los invitados de honor. Estaban preparando esto para nosotros. Así que, por supuesto, tenía que ayudar. Daniela estaba haciendo su parte cuidando a los niños. Eso también era importante. Permitía a las madres concentrarse en la cocina.
Así que saqué la Ashikirimaru y me puse a trabajar desollando a los animales. Si lo hacía limpiamente, podrían usarlo para ropa. Era un recurso valioso.
Después, separamos las partes. Era difícil saber qué era qué a simple vista. Así que corté las extremidades y la cabeza y luego corté el cuerpo por la mitad para que fuera fácil de cocinar. Entonces quedó terminado.
Fue más difícil de lo que parecía. Y para cuando terminamos, había empezado a oscurecer.
“¿Pasaron por un asentamiento de gente bestia en su camino hacia aquí?”
“Sí. Ahí es donde oímos hablar de ti.”
“Ellos también lo pasaron mal. Pero nos ayudamos mutuamente…”
Después de eso, las madres sazonaron la carne y comenzaron a arrojarla a la enorme hoguera. Me puse al lado de Arturo y observé.
“Les enseñé a hacer casas como tú dijiste, y vivimos juntos durante un tiempo. También me reuní con el Gato de las Nieves unas cuantas veces. Son mis amigos de por vida.”
“Lo mismo que Daniela y yo. Por supuesto, también te consideramos nuestro amigo.”
“Gracias. …Ah, realmente fue un largo camino. Un viaje duro. Pero hicimos amigos para toda la vida y conseguimos un refugio seguro. Todo valió la pena. Eso es lo que pensaba.”
“¿Lo pensabas?”
Arturo miró el fuego con ojos amables.
“Sí, este no es el final. Nuestra nueva vida comienza. Bueno, debería haber visto esto venir.”
“Jaja. Supongo que sí. Una nueva vida en este paraíso…”
“Perdimos a muchos de nuestros amigos. Pero ese fue el precio que pagamos. Y por eso tengo la intención de proteger este lugar hasta que muera.”
Dudaba que algún humano viniera aquí. Había que atravesar el mar de árboles y las montañas.
Ahora estaba bastante seguro de que este lugar era una especie de campo de experimentación para los elfos antiguos. Tal vez era para preservar ciertas especies o plantas. Pero ahora no estaban aquí. Así que nadie podía quejarse si los orcos se instalaban en el lugar. Habían dejado de atacar a los humanos. Seguramente se les debería permitir vivir aquí en paz.
“Bueno, el festín comenzará pronto. Come todo lo que puedas y disfruta.”
“Sí, por supuesto.”
El sol se había puesto, y el mundo estaba bañado en el color del fuego.
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